HISTORIA 11, Khelifa Mohamed Amine

HISTORIA 11, Khelifa Mohamed Amine

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HISTORIA 11, Khelifa Mohamed Amine
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11 ORÁN Y MAZALQUIVIR: UNA HISTORIA DE FORTIFICACIONES Khelifa Mohamed Amine.     Introducción Era imprescindible para nosotros aprovechar del encuentro Alcalá – Orán (1509-2009), hospital para hacer resaltar un lado importante que no podemos negar, store que es: hacer hincapié sobre la arquitectura, precisamente las fortificaciones militares, española de los siglos XVI, XVII y XVIII dando informaciones, que vemos útiles sobre este tema. Pero antes quisiéramos hacer un vistazo histórico sobre la presencia española en Orán. Después de la muerte de “Isabel la católica”, el cardenal Fray Francisco Ximenés de Cisneros fue nombrado regente de castilla; confió al marino veneciano Jerónimo Vianelli (que conocía bien las costas argelinas) la tarea de organizar una expedición de reconocimiento del litoral Magrebí, Vianelli propuso la ocupación de Mazalquivir, antepuerto de la próspera ciudad de Orán. Antes de Orán, Mazalquivir ha sido conquistado el 13 de septiembre de 1505 por Don Diego Fernández de Córdoba, alcaide de los Donceles (el marqués de Cómares). La falta de agua en Mazalquivir y los continuos ataques de los musulmanes venidos del interior favorecieron la ocupación de Orán que era pues, una necesidad para conservar Mazalquivir, y un deseo de continuar las cruzadas y liberarse de la presión de los corsarios en el “Mare Nostrum” (como lo señalan siempre los grandes historiadores en sus escritos). Con esta nueva expedición contra Orán, el cardenal confió las operaciones militares a Pedro Vereterra, conde de Oliveto, conocido bajo el nombre de Pedro Navarro. El propio prelado, a pesar de su avanzada edad -tenía más de 70 años- acompañó a los 15 000 hombres, que salieron del puerto de Cartagena a bordo de 90 navíos y desembarcaron en Mazalquivir el 18 de mayo de 1509; al día siguiente la ciudad de Orán fue tomada y sometida a un severo pillaje, con un rico botín. También, hubo una masacre de la población y la liberación de 300 cautivos cristianos. Sin embargo, durante los tres siglos de presencia española en el enclave oranés la ciudad conoció muchos cambios, sobre todo el sistema defensivo militar  del enclave, construyendo cinco castillos, muchos fuertes, algunas torres de vigilancia  y puestos para fusileros, además de red subterránea, todos mantuvieron Orán de pie durante una larga estancia entre las manos de los españoles, a pesar de su recuperación en 1708-1732. Para ilustrar eso hemos escogido al castillo de Santa Cruz.          Castillo de Santa Cruz                                                   Hacia  mediados del siglo XVI los soldados españoles y sus auxiliares (moros de paz , la tribu de los Beni Amer y Hmien ) construyeron, en la cima de la montaña “Aidour” (llamada la silla por los españoles y también recibió el nombre de murdjadjo) , el castillo de Santa Cruz que domina totalmente las plazas de Orán y de Mazalquivir , tiene una forma irregular, su guarnición constó doscientos hombres en tiempo de paz, su artillería fue compuesta de siete cañones de hierro y un mortero, según Vallejo necesitó uno más.  

 

 

                    El castillo de Santa Cruz tiene dos puertas, a la derecha de la primera hay una escritura en francés que dice: “Santa Cruz, edificado a mediados del siglo XVI y ha sido restaurado por el genio militar francés desde 1854 hasta 1860”. En la segunda puerta hubo un puente levadizo que los franceses cambiaron con una pasarela, el techo de la entrada es un poco alto, porque en aquel momento entraban a caballo.                   A través de estas dos puertas se comunica  un camino  cubierto en forma de túnel que los soldados utilizan en tiempo de guerra, hacia la derecha conduce a la sala del gobernador, y hacia la izquierda nos conduce a otra pequeña sala un poco secreta, donde hay la entrada del túnel que conduce al San Gregorio[1] y también al fuerte de Santiago[2].                       Pues en la segunda parte del castillo de Santa Cruz, llegamos a una sala espaciosa que sirve como observatorio, dentro de la cual hay dos grandes ventanas. La primera que se encuentra hacia la izquierda de la entrada, nos da una vista general sobre la plaza y el puerto de Mazalquevir, y la segunda que está en la derecha, nos da una vista general sobre la plaza de Orán, su puerto, el fuerte de Santiago y de San pedro, el fuerte de la campana[3] , también se puede ver el castillo de Rosalcázar[4] y los demás fuertes.                   A Causa de la situación del castillo de Santa Cruz tenía un gran problema de agua, así los ingenieros españoles crearon un sistema de aprovisionamiento de agua, a través de la recuperación del agua de la lluvia, que pasa primero en un estanque de arena, luego en otro de cal, para llegar finalmente en un gran tanque de 300 metros cúbicos para obtener más agua potable. Detrás del muro izquierdo del tanque, se encuentra la cocina que está aprovisionada de agua a través de una apertura que comunica entre ellos. Al lado de la cocina hay un escotillón con un  sistema de cierre y apertura a corredera. Sin embargo, en la parte Oeste del castillo falta el agua, entonces los españoles cavaron un pozo, y le han comunicado con el tanque en su esquina derecha (se puede ver en las fotografías) para aprovisionar aún esta parte Oeste. Pues, a través de un esquema se puede entender mejor este sistema de aprovisionamiento de agua.                                 Desde luego la parte Sur del castillo de Santa Cruz que mira a la montaña y donde se encontraba el vivaque de los otomanos, fue la parte más vulnerable del castillo por la cual ha sido atacado y ocupado en 1708 por el bey de Mascara Mustafa Buchlaghem. Después de la recuperación del enclave en 1732 por Montemar se añadió una construcción al castillo en la parte que mira a la montaña (Sur)  durante la ampliación y la restauración de Santa Cruz por los ingenieros Antonio de Montaigu de 1732 hasta 1733, luego por Juan Ballester y Zafra de 1734 hasta 1737. El techo de esta construcción está cubierto de tierra por dos motivos; el primero, afín de que las bolas de cañones no causen daños tremendos, segundo las bolas de cañones se recuperan, para utilizarlas otra vez. Además de este reforzamiento de la parte Sur y para remediar a los fallos de 1708, los ingenieros proyectan  construir un corte que separa actualmente el castillo de la montaña vecina, para aislar la fortaleza, y sobre todo, impedir a la caballería y a la artillería argelinas dominar el castillo e incluso acercarse a él. Esta idea no se realizó hasta el mandato del gobernador Eugenio Alvarado. Un mapa bien preservado en el archivo de Simancas muestra las dimensione del corte en 1771, un vacío rectangular de 25 varas[5] de ancho y 6 varas de profundidad. En años posteriores el foso ha sido ampliado con explosivos y el trabajo de los presidiarios y los soldados. Hacia 1790 presentaba su aspecto actual que la mayoría de los oraneses piensan que es el resultado de causas naturales o debido al terremoto de 1790 aunque es la obra del ser humano.                               Además de los circuitos defensivos constituidos por un conjunto de castillos, fuertes, torres de defensa y puestos para fusileros que mantuvieron la ciudad de Orán de pie durante tres siglos, a pesar de la estancia que pasó entre las manos de los Otomanos, entre 1708 hasta 1732; hay que citar el gran papel que desempeñó la red de túneles y de minas, asegurada por los fortines de (San José, San Nicolás y San Antonio)[6]; y los fuertes de (Torre Gorda y Santa Bárbara)[7], también otra red que asegura el desplazamiento entre Santiago, Santa Cruz y San Gregorio. En efecto, la obra subterránea más importante fue aquella que comunicó San Andrés[8] con San Felipe[9] y San Fernando[10]. Sin embargo, antes de la última evacuación de Orán, en 1792, los españoles saltaron la red de los fuertes, los túneles y las minas; a fin de que este asombroso complejo militar no quedase intacto a las autoridades argelinas. También, eso hubiera podido atraer las apetencias de otras potencias marítimas europeas, que aún tenían importantes intereses en el mediterráneo y de un Orán magníficamente situado y fortificado.                       Bibliografía - Epalza, Mikel de, Vilar, Juan Bautista, (1988),  Planos y Mapas Hispánicos de Argelia siglos XVI –XVIII. Madrid, Instituto hispano-árabe de cultura. 399 págs. - Epalza, Miguel de, El Corso, Mohamed. (1978),  Oran et L’ouest Algérien au XVIII siècle. Alger, Bibliothèque Nationale.166 págs. - Fey, Henry León, (1987), Histoire d’Oran. Paris, Jacques Antoine Rover. 348 págs. - Revue africaine, 1925, N° 66, Alger, Office des Publications Universitaires. 323-368 págs.  


[1]- El Castillo de San Gregorio, se situó más debajo de Santa Cruz; antes en este lugar los árabes poseyeron una torre que los españoles agrandaron en 1588, bajo el mandamiento del capitán Don Pedro de Padilla y le dio el nombre de San Gregorio.
[2]- El fuerte de Santiago como él de San Pedro fueron construidos en el siglo XVIII bajo el mandamiento del capitán general Don  José Vallejo tuvieron una artillería, un polvorín y un alojamiento para oficiales y soldados; su tarea fue la defensa del parte del campo oranés que se encuentra entre el enclave y el castillo de Santa Cruz.                                                 
[3]- El fuerte de la campana se encuentra en la parte Noroeste dela Casbah,  asegura la comunicación entre Santa Cruz, Santiago y la casa del gobernador en tiempo de guerra.
[4]- Rosalcázar era el mejor de todos los castillos de Orán, fue edificado en 1347 por el sultán de los Mérinidas Abou el Hasán. Su guarnición fue compuesta de doscientos hombres en tiempo de paz y su artillería tuvo doce cañones de bronce diecisiete de hierro y dos morteros.
[5]- Vara: unidad tradicional de longitud que en castilla equivale a836 mm (explicación dela RAE).
[6]- San José, San Nicolás y San Antonio: Fueron  los puntos más importantes que formaron una línea defensiva interior entre San Andrés y Orán, también estuvieron unidos con una barrera.
[7]- LaTorre Gorda y Santa Bárbara: Las dos formaban una línea defensiva oriental al vallecio unidos con una barrera desde Rosalcázar hasta San Andrés.
[8]- San Andrés: Fue edificado por el marqués de Cansano entre 1692 y 1697. Este castillo se sitúa entre Rosalcázar y San Felipe. En el 4 de mayo de 1769 el castillo fue fulminado lo que introdujo la explosión de su polvorín, enseguida el ingeniero Hontabat se puso a reconstruirlo. Así pues, San Andrés puso alojar  los doscientos hombres y su artillería constaba de trece cañones de bronce dieciséis de hierro y tres morteros.   
[9]- San Felipe: Estuvo situado al Este de la plaza de Orán, después de San Andrés, así  fue el más lejano de la ciudad. El castillo tuvo cisternas de agua suficientes para su guarnición, su batería fue compuesta de dieciséis cañones de bronce, doce de hierro y tres morteros.
[10]- El San Fernando fue edificado en 1734 por Don José Vallejo. Antes, en este, lugar había una torre que se llamaba la torre de los santos edificada en 1514 después de un ataque de Barbarroja.      
Extracto


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el 19 enero, 2012 a las 18:19 Emilio Sola